Cómo los niños pueden iniciarse en el mundo de la robótica y la inteligencia artificial

Cómo los niños pueden iniciarse en el mundo de la robótica y la inteligencia artificial

No podemos predecir el futuro, pero podemos tratar de anticiparnos basándonos en algunas tendencias del presente. Últimamente, el uso de la robótica y la inteligencia artificial en el campo laboral se ha convertido en un debate en alza. Las evidencias de que ambas tecnologías serán clave en el futuro de los trabajadores son claras, e incluso instituciones tan prestigiosas como el Foro Económico Mundial o el Institute for the Future lo han reflejado en diversos reportes.

Según sus proyecciones, los trabajos del futuro requerirán conocimientos más especializados sobre robótica e IA, y aquellos que los posean tendrán muchas más facilidades para destacar en el mercado laboral. Por ello, en este artículo, nuestro compañero Emilio Granell nos cuenta la experiencia que ha vivido con su propio hijo y cómo podemos iniciar a los niños en el mundo de la tecnología, de modo que les ayudemos a desarrollar competencias que serán clave cuando sean mayores.

¿Cuáles son las competencias clave que deberán tener los trabajadores del futuro?

Muchas de las competencias clave que más se valorarán están relacionadas de manera directa o indirecta con el ámbito tecnológico. Podemos citar algunas recogidas en diversos artículos como la revista de TopUniversities o el Foro Económico Mundial, como podrían ser: la flexibilidad cognitiva, la alfabetización digital, el pensamiento computacional, el juicio y la toma de decisiones, la inteligencia emocional y social, o tener una mentalidad creativa e innovadora. Tampoco podemos olvidar el pensamiento crítico, que es la capacidad de analizar y evaluar la información, intentando esclarecer la veracidad de dicha información evitando posibles sesgos externos.

Todas estas habilidades son muy importantes (no sólo para el mundo laboral), y pueden trabajarse con los niños ya desde muy pequeños. Por supuesto, no todas las personas tenemos las mismas capacidades, ni los mismos intereses. Por lo que del mismo modo que no es necesario que todas las personas aprendan a tocar un instrumento musical o pintar cuadros, no es necesario que todos los niños sean expertos en disciplinas tecnológicas, como la informática, la robótica o la inteligencia artificial. Sin embargo, jugarán un papel muy relevante en los próximos años y necesitamos estar familiarizados con ellas.

Así que, ¿qué podemos hacer los padres para desarrollar estas habilidades con nuestros hijos? Bueno, el primer paso es comprobar que realmente tienen interés por este campo. Nunca debemos forzarlos a hacer nada que no quieran. En mi caso, mi hijo, a los tres años, me preguntó si podía ayudarme en mi trabajo, así que lo que te voy a decir será desde mi experiencia personal.

“Papá, hagamos un robot”

Lo primero que hice cuando mi hijo, con tres años, empezó a decirme que quería trabajar conmigo y que quería programar robots, fue rescatar un antiguo ordenador portátil que tenía por casa. Este portátil, aunque no es muy potente, con Debian funciona muy bien y, al tener una pantalla de 11 pulgadas, tiene el tamaño perfecto para que lo manejen los niños pequeños.

Ahora bien, mi hijo tenía tres años, ¡no sabía leer! ¿Qué podía hacer un niño tan pequeño con un ordenador sin pantalla táctil? Pues como ya demostró Sugata Mitra lo que hacen los niños en general con cualquier cosa que les dejen, tocarlo todo y aprender cómo funciona.

Iniciación de un niño con la tecnología, paso a paso

1. GCompris

La primera aplicación que le instalé fue GCompris, la cual es una suite educativa muy completa, no sólo en variedad de campos de estudio: lenguaje, matemáticas, electrónica, geografía… y por supuesto informática, sino también en niveles de dificultad. Para mí, fue fascinante ver como él solo aprendió a utilizar el ordenador mediante el teclado, el ratón y el panel táctil, al mismo tiempo que aprendía el abecedario, los números, sus primeras nociones de álgebra de Bool mediante ejercicios de puertas lógicas, e incluso el ciclo del agua y la generación de energía renovable.
Por otro lado, al dejarle utilizar el ordenador sin supervisión, aprendió a manejarse por el escritorio y la configuración de las aplicaciones que le resultaban interesantes. Aunque en esto no voy a mentir: casi todas eran juegos.

2. Zowi

¿No habíamos dicho que quería aprender a programar robots? Si, por eso lo siguiente que adquirí para enseñarle a programar robots fue, efectivamente, un robot. Después de buscar mucho me decanté por Zowi, un pequeño robot pensado justamente para facilitar la educación tecnológica. Este robot se puede programar utilizando un lenguaje de programación gráfico por bloques.

3. La aventura de Crocro

Para crear un programa mediante la programación por bloques, se deben conectar una serie de piezas que conforman la secuencia de pasos o instrucciones a seguir por el robot. Existen otras opciones para enseñarles estos conceptos básicos de programación y algoritmia como, por ejemplo, juegos como la Aventura de Crocro, en el que los niños deben ayudar a un pequeño cocodrilo a encontrar la comida indicándole la secuencia de pasos que debe seguir para conseguirlo.

4. Super Doc

Sin embargo, mi preferido es Super Doc. La primera ventaja que le encontré a Super Doc es que los niños pueden programarlo sin necesidad de un ordenador (y por supuesto sin supervisión de un adulto), mediante unos botones que tiene en la cabeza. Super Doc presenta varios niveles de dificultad asociados a diferentes personajes, como son un dragón, una princesa o un mago. Tiene un tablero por el que se mueve para recoger objetos según las indicaciones que se le dé

5. Futuros genios

La curiosidad de los niños es infinita, y la siguiente pregunta fue: ¿cómo deciden los robots qué hacer? En mi caso, encontré un libro sobre robótica e inteligencia artificial pensado justamente para los más pequeños. No es necesario entrar en detalles técnicos, lo importante es que entiendan los conceptos básicos sobre qué son los sensores, actuadores y el procesador, y que, mediante técnicas de inteligencia artificial como las redes neuronales, podemos enseñar a los robots a tomar decisiones para actuar según lo que perciban en sus sensores.

6. BQ Zum Kit Junior

Pero claro, esto dio pie a nuevas preguntas: ¿cómo perciben y actúan los robots? Para responder a estas preguntas, encontré este kit de robótica pensado para los más pequeños. Con él, podemos crear un prototipo de robot conectando los sensores y actuadores que deseemos en cada momento, como ruedas y luces led, y sensores de iluminación o temperatura. También existe una versión pensada para adolescentes.

Conclusión

Como conclusión, hay multitud de posibilidades para que los niños que tienen interés comiencen a adquirir habilidades tecnológicas desde edades muy tempranas. Muchas de ellas son software libre y gratuitas y, en cuanto al hardware un Super Doc, se puede comprar desde 35€.